: ¿Qué es la teología?

: ¿Qué es la teología?

La teología significa literalmente “el estudio de Dios”. Varias religiones y filosofias han propuesto diferentes definiciones en cuanto a la verdad sobre Dios. Para ayudarle a comprender muchas de las perspectivas competitivas sobre Dios, exploraremos las varias maneras en que las personas comienzan incorrectamente en sus estudios de Dios para que podamos comenzar con el pie correcto.

El ateísmo

El ateísmo se deriva del negativo “a-”, que significa “no”, “ni” o “sin”, y “theos”, que significa “dios”. Básicamente, el ateísmo cree que Dios no existe. Similar al ateísmo son las creencias de que no hay demonios, ni sobrenaturales, ni milagros ni verdad moral absoluta sobre todas las culturas, y nada más que el mundo material, por lo que nadie tiene una alma y no hay posibilidad de una vida spiritual después de la muerte física. Curiosamente, el ateísmo es un concepto históricamente joven.

La palabra “ateísmo” no existe en el idioma del Antiguo Testamento, el hebreo. Además, el Antiguo Testamento generalmente asume que todos creen en Dios, diciendo: «Dice el necio en su corazón: No hay Dios» [NOTA: Sal 14:1, 53:1]

El agnosticismo

Al decir que no hay dios, el ateísmo tiene que demonstrar que Dios no existe; este requiere que tengamos comprensión completa, lo cual es imposible. Consecuentemente, el agnosticismo se ha vuelto más popular entre los escépticos de la existencia de un Dios o dioses. El agnosticismo está derivada de “a-“, que significa “sin”, y “gnosis”, que significa “comprensión”. Un agnóstico es inconsciente o ignorante de Dios. El agnosticismo dice que, aunque podemos examinar el mundo físico, no tenemos acceso al mundo espiritual, por lo que nunca sabremos si existe un Dios o dioses.

El agnosticismo supera la posibilidad de que, si Dios existe, Él podría revelarse a nosotros y de ese modo darse a conocer. Este es precisamente lo que enseña la Biblia. Jesús «descendió de los cielos» [NOTA: Jn 3:13, 6:38]. En Jesus «la Palabra se hizo hombre y vino a vivir entre nosotros. Estaba lleno de amor inagotable y fidelidad. Y hemos visto su gloria, la gloria del único Hijo del Padre» [NOTA: Jn 1:14] Jesús dice de si mismo, «Los que me han visto a mí han visto al Padre» [NOTA: Jn 14:9]. Jesús vino de los cielos y reveló Dios a nosotros para eliminar la nube del agnosticismo para que podamos ver a Dios claramente.

El deísmo

El deísmo enseña que un dios creó el universo, pero luego dejó su creación sola y no tiene nada que ver con ella, como un propietario ausente. Con dios ausente, el deísmo enseña que el mundo se rige por leyes naturales que Dios estableció para gobernar su creación. Por consecuencia, los milagros son imposibles porque el universo es un sistema cerrado, y Dios no interviene en su creación ni anula sus leyes naturales.

El deísta más notable y consistente fue el presidente Thomas Jefferson (1743-1826). Él se sentó en la Casa Blanca con una navaja de afeitar en una mano y la Biblia en la otra para recortar aquellas partes de la Escritura que él decidió que no eran ciertas. El resultado se llamaba La filosofía de Jesús de Nazaret, o La vida y morales de Jesús de Nazaret. Solo uno de cada 10 versículos de las Escrituras sobrevivió, cero milagros se consideraron factuales y la resurrección de Jesús fue sistemáticamente eliminada de las páginas de las Escrituras.

Las inconsistencias con el deísmo son abundantes, incluso el hecho de que niegan los milagros, pero afirman el gran milagro de la creación de Dios. Además, Jesús no es solo el Dios Creador del universo, sino también el Dios Sustentador continuo que contradice la creencia central del deísmo: «porque, por medio de él, Dios creó todo lo que existe en los lugares celestiales y en la tierra. Hizo las cosas que podemos ver y las que no podemos ver, tales como tronos, reinos, gobernantes y autoridades del mundo invisible. Todo fue creado por medio de él y para él. Él ya existía antes de todas las cosas y mantiene unida toda la creación.» [NOTA: Col. 1: 16-17]

El diosismo finito

El diosismo finito enseña que dios existe, pero con limitaciones, como no ser todo consciente (omnisciente) o todopoderoso (omnipotente). La motivación detrás del diosismo finito es explicar como un buen dios podría existir con todo el mal y la injusticia en el mundo. El diosismo finito intenta explicar la bondad de dios y el mal en el mundo al afirmar que, si Dios es bueno, es limitado y no puede detener el mal en el mundo.

Los problemas con el diosismo finito son muchos. Primero, un dios finito necesitaría un Dios más grande y infinito para sostener su existencia continua. Segundo, el mal pasado y presente no niega el hecho de que el Dios todopoderoso e infinito algún día pondrá fin al mal, como enseñan las Escrituras. Tercero, la existencia del mal no refuta de ninguna manera la infinita sabiduría y poder de Dios. Cuarto, un dios finito simplemente no es útil; un dios tan indefenso realmente no puede ayudarnos en nuestro tiempo de necesidad y, por eso, no merece adoración ni devoción.

Jesús contesta la pregunta que motiva la creencia en el diosismo finito. En la cruz de Jesús, vemos la hora más oscura de la historia. A manos de un sistema legal injusto, rodeado de cánticos de una mafia sedienta de sangre, la persona más grande en la historia del mundo, Jesucristo, fue brutalmente asesinado. En ese momento, parecía que Dios era finito porque no hizo nada para intervenir y detener la injusticia. Sin embargo, tres días después, Jesús se levantó de la tumba, derrotando al mal. Dios se demostró no tan impotente sino poderoso. Por eso, a través la vida, muerte, y resurrección de Jesús, la pregunta es, «¿Dónde está Dios cuando duele?» Se contesta: Dios es bueno y poderoso y está trabajando en Jesucristo para lograr la victoria y la vida, incluso a través de lo que aparece en la primera mirada nada más que derrota y muerte.

El panteísmo

El panteísmo se deriva de “pan”, que significa “todo” y “teísmo”, que significa “dios”. El panteísmo es la creencia que todo es dios o que todo el mundo material en si mismo es dios o divino. Basado en el monoteísmo, que es la creencia de que toda realidad es un ser interrelacionado, el dios del panteísmo es impersonal. El panteísmo es popular en el hinduismo y algunas formas del budismo además de la Nueva espiritualidad (también llamada Nueva era), Ciencia Cristiana, la Iglesia de la Unificación, Cienciología, y Teosofía. El panteísmo está generalmente advocado en películas como Star Wars, cuando Dios no es una persona sino una fuerza impersonal que nos envuelve e incluye a todos

En el panteísmo no hay milagros porque Dios no está sobre este mundo ni poderoso para cambiarlo. También se dice que el dolor, la materia, y el mal son ilusiones irreales. Eso no tiene ningún sentido después de que te golpees el dedo del pie al salir de una clase de yoga.

El panteísmo tiene muchos otros problemas, incluida la negación de que el universo tuvo un comienzo, aunque las teorías del Big Bang y el Segundo principio de la termodinámica dicen lo contrario, declarando que el mundo físico es una ilusión, y la incapacidad de explicar cómo un mundo sin inteligencia o moralidad creó las dos. El panteísmo se refuta claramente en Romanos 1:25: «Cambiaron la verdad acerca de Dios por una mentira. Y así rindieron culto y sirvieron a las cosas que Dios creó pero no al Creador mismo, ¡quien es digno de eterna alabanza! Amén.» Debemos adorar al Creador en lugar de su creación, como anima el panteísmo.

El panenteísmo

El panenteísmo se deriva de “pan” (todo) + “en” + “teísmo” (dios), que en conjunto significa “todo en Dios”. Este es diferente del panteísmo, porque el panenteísmo enseña que Dios es parte o en la creación para que la creación es similar al cuerpo de Dios que alberga su espíritu. En el panenteísmo, Dios existe en dos polaridades: Dios existe en una forma como una realidad presente, y en otra forma como una posibilidad futura. Se dice que Dios está creciendo, madurando, y evolucionando de su estado actual hasta su estado potencial, como la humanidad. Como resultado, se dice que Dios es tanto finito e infinito, y eterno sin un principio, pero no eterno y con un principio. Contradiciéndose a sí mismo, el panenteísmo enseña que Dios se hizo a sí mismo, lo que requeriría que él existiera antes de existir. Además, el panenteísmo dice que Dios es actualmente imperfecto, pero siempre está aprendiendo, creciendo, y cambiando para ponerse más y más perfecto.

A pesar de las auto contradicciones del panenteísmo, fue sostenido en el mundo antiguo por hombres como Platón. Desafortunadamente, algunos que profesan ser cristianos también han adoptado la falsa creencia de Dios postulado por el panenteísmo. Esto incluye algunos teólogos feministas y marxistas, teología del proceso, y algunas formas de teísmo abierto que enfatizan la inmanencia de Dios sobre su transcendencia, y el cambio de Dios sobre su inmutabilidad.

El panenteísmo no está de acuerdo con el Dios de la Biblia. Algunos de los atributos de Dios incluyen su inmutabilidad continua, su perfección eterna, su soberanía sobre la creación, su infinitud, y su independencia del mundo en lugar de dependencia en el.

El politeísmo

El politeísmo proviene de “poli”, que significa “muchos”, y “teísmo”, que significa “dios”.  El politeísmo dice que hay más de un dios. Las religiones que se adhieren al politeísmo incluyen el hinduismo, el confucianismo, el sintoísmo, el taoísmo, el jainismo, la mitología griega antigua, el mormonismo, la cienciología, y la Iglesia de la Unificación.

El principal problema con el politeísmo es que es imposible que existan dioses múltiples, completamente iguales y finitos sin un Dios superior e infinito para gobernar como su Creador y supervisor. Claramente, la Biblia reconoce que muchas personas adoran a dioses falsos. Solo hay un Dios verdadero [NOTA: 2 Cró 15:3; Jer 10:10; Jn 17:3; 1 Tes 1:9; 1 Jn 5:20–21] y todos los demás “dioses” son simples ídolos y no “dioses” en absoluto. [NOTA: Deut 32:21; 1 Sam 12:21; Sal 96:5; Is 37:19; 41:23–24, 29; Jer 2:11; 5:7; 16:20; 1 Cor 8:4; 10:19–20].

Dioses falsos

El Antiguo Testamento dice claramente que solo hay un Dios [NOTA: Deut. 4:35, 39; 6:4–5; 32:39; 1 Sam 2:2; 2 Sam 7:22; 22:32; Sal 86:8–10; Is 37:20; 43:10; 44:6–8; 45:5, 14, 21–22; 46:9]. El Nuevo Testamento está totalmente de acuerdo [NOTA: Jn 5:44; Rom 3:30; 16:27; 1 Cor 8:4–6; Gal 3:20; Ef 4:6; 1 Tim 1:17; 2:5; St 2:19; Jud]. La Biblia también enseña que no hay nadie como Dios [Nota: Éx 8:10; 9:14; 15:11; 2 Sam 7:22; 1 Re 8:23; 1 Cró 17:20; Sal 86:8; Is 40:18, 25; 44:7; 46:5, 9; Jer 10:6–7; Mi 7:18]. Por lo tanto, declararse como Dios es una mentira satánica [NOTA: Gn 3:5; Is 14:14; Jn 8:44].

Pero, los demonios (seres espirituales caídos) también pueden actuar como dioses para ser adorados, aunque por sus falsos signos y milagros. Esto también pasa por el libro del Éxodo cuando el Reino de Dios y el reino de Satanás compiten por la supremacía en una batalla cósmica.

  • Éxodo 12:12 – Esa noche pasaré por la tierra de Egipto y heriré de muerte a todo primer hijo varón y a la primera cría macho de los animales en la tierra de Egipto. Ejecutaré juicio contra todos los dioses de Egipto, ¡porque yo soy el Señor!
  • Éxodo 18:10-11 – ¡Alabado sea el SEÑOR! —exclamó Jetro—. Pues los rescató de los egipcios y del faraón. ¡Así es, rescató a Israel del poder de Egipto! Ahora sé que el SEÑOR es más grande que todos los demás dioses, porque rescató a su pueblo de la opresión de los egipcios arrogantes.
  • Éxodo 20:3 – No tengas ningún otro dios aparte de mí.

Estos “dioses” son ángeles caídos muy poderosos y otros seres espirituales que se rebelaron contra Dios. Vilipendian al Dios real y quieren reemplazarlo con dioses. Prácticamente, esto significa que hay espíritus demoniacos muy poderosos, con nombres como Baal, Chemosh, Molech, Brahman, Jezabel, Allah, La Madre Tierra, Mammom (dinero), y Afrodita (sexo), que son adorados erróneamente por multitudes como dioses. Un tema principal de la Biblia es que Dios crea y Satanás falsifica. Los falsos dioses están detrás de falsas religiones dirigidas por falsos maestros que realizan falsos milagros, todos esquemas para desviar a las personas del Dios real hacia los falsos dioses.

Desde el principio, el pueblo de Dios ha vivido con la presión constante para aceptar otras religiones y “dioses” tan dignos de adoración como el Dios de la Biblia. Muchas veces las personas son como Salomón y dividen su devoción entre Dios y los “dioses” [FOOTNOTE: 1 Re 11]. Para envalentonarnos, la Biblia presenta historias conmovedoras de seguidores fieles como Sadrac, Mesac, Abednego y Daniel que no comprometerían su devoción a Dios a pesar de enfrentar oposición y persecución [NOTA: Dn 3:7].

El monoteísmo

El monoteísmo enseña que solo hay un Dios personal que es separado (transcendente) del universo, aunque está involucrado en el (inmanente). Como resultado, muchas personas han considerado el cristianismo como una de las muchas religiones monoteístas junto con el judaísmo y el islam. En cierto sentido, el cristianismo es monoteísta, ya que cree en un solo Dios. Sin embargo, tras una investigación más profunda, la Biblia no está impresionada con el mero monoteísmo porque el objetivo de Dios no es que simplemente creamos en un Dios, como dice Santiago 2:19, «Tú dices tener fe porque crees que hay un solo Dios. ¡Bien hecho! Aun los demonios lo creen y tiemblan aterrorizados.» El Dios del cristianismo como se revela en la Biblia es un Dios que existe en la comunidad trinitaria del Padre, Hijo, y Espíritu. Ninguna otra religión comparte el concepto de la Trinidad con el cristianismo. Ahora que hemos eliminado las formas en que podemos comenzar con el pie equivocado, ahora podemos comenzar con el pie correcto al aprender sobre el único Dios verdadero.